La atención a la respiración apacigua automáticamente nuestra mente y nuestro cuerpo, permitiéndonos contemplar con más sosiego y discernimiento nuestros pensamientos y sentimientos. Y cuanto más despiertos estamos, con mayor claridad y perspectiva podemos ver las cosas. En lugar de vernos desbordados por nuestras reacciones instintivas y perder el equilibrio, tenemos la libertad de elegir las respuestas más eficaces y adecuadas a las situaciones estresantes que nos toca vivir.
En éste taller vamos a practicar movimientos de despertar corporal basados en el “Método de la liberación de las corazas” y la “Consciencia Sensorial”. Dejaremos los frenos, las protecciones que nos liberarán de los encierros que impiden tener una capacidad respiratoria más amplia, fluida, consciente y que llegue a oxigenar a todos los tejidos de nuestro cuerpo.
Es como si la respiración fuese un camino que siguiéndolo sencillamente, acaba conduciéndonos a un tesoro que se halla oculto en nuestro interior.